Actualmente hablamos de globalidad, sin tomar en cuenta que ésta no es privativa de la modernidad, con ella desde la antigüedad se han mezclado culturas, se han ampliado horizontes, las razones son diversas, huir de la atrocidad, de los sitios con agricultura limitada, afán de conquista, curiosidad por entender que significado tiene el horizonte que vemos a la distancia y si en verdad los dogmas fabricados tienen o no sustento.
He de continuar con una serie de reflexiones que pongan en perspectiva lo que algunos ya saben y analizaron en su momento. Sigo pensando en la importancia de la raíz que mueve y alimenta al mundo de un futuro que se prepara con habilidad y destreza, sin importar culturas, idioma, creencias para avanzar hacia un nuevo territorio donde todo lo aprendido nos de opciones y nos libere del ropaje donde algunos deciden que no podemos entrar o pertenecer, solo por ser diferentes.
Siempre hay un recorrido que nos lleva al encuentro de nuevos descubrimientos, algunos de ellos posiblemente quedan en manos de los estudiosos, pero es interesante ver la impresionante huella de los vikingos en la historia, en sus viajes y la forma como interactuaron con culturas donde hemos encontrado que incluso los primeros atisbos del español, tienen una pátina delgada pero fácilmente diferenciada de su influencia en la historia, ahora veamos su arribo a lo que es nuestro continente, cuya escala en el tiempo coloca a América del Norte, como el sitio descubierto por los nórdicos, mucho antes de que llegaran los mencionados “Descubridores o conquistadores de América”.
Vamos a la referencia:
Helge Marcus Ingstad (Meråker, 30 de diciembre de 1899 – Oslo, 29 de marzo de 2001) fue un exploradornoruego. Después de situar algunos asentamientos vikingos, Ingstad y su esposa, la arqueólogaAnne Stine Ingstad, localizaron en 1960 los restos de un asentamiento vikingo en L’Anse aux Meadows, en la provincia de Terranova, en Canadá. Fueron de esta manera los primeros en demostrar de manera concluyente que los escandinavos de Groenlandia habían encontrado una ruta a través del Océano Atlántico hasta América del Norte, aproximadamente 500 años antes que Cristóbal Colón y Juan Caboto. También son los autores de la teoría de que la misteriosa desaparición del asentamiento vikingo de Groenlandia en el siglo XIV-XV podría explicarse por la emigración a América del Norte. (Fuente: wikipedia) y desde luego el título del libro que resulta interesante: The Viking Discovery of America: The Excavation of a Norse Settlement in L’Anse Aux Meadows, newfoundland de los autores: Helge Ingstad y Anne Stine Ingstad.
¿Qué hay más allá del horizonte?
Ante todo esto, solo resta decir que en el navío del Maestro se poso una gaviota, aún está con Ave y Estrella, si definitivamente así es...
Fotografía: “El Sol se alza sobre el mar” del Dr. Enrique González Gallardo.
De igual forma había gente moviéndose, analizando el poder del Sol y de la Luna, había gente preguntándose que sucedía en ese sitio al que no era fácil llegar, ese lugar que les invitaba a soñar con un mundo distante y mágico, dónde bolas de fuego incendiaron sus campos y eran atemorizados por el rayo mortífero, cegados por una carga impresionante de vaporosos mantos de nubes y arrasados por tormentas que bajaban desde las alturas con toda la furia de los Dioses, sus deidades, su visión personal del mundo, su entrega lo desconocido buscando la forma de aplacar a los siniestros placeres de un gobernante que jamás les hablaba en su propio idioma.
Cómo acallar los siniestros placeres de un gobernante que jamás les hablaba en su propio idioma.
Habrán de encontrarse en alguna parte de los confines del planeta, podrán reconocerse y disponer en otras ocasiones de sus propios Dioses para imponerlos, Sangre, animales, símbolos, semejanzas estelares, incluso humanos a los que se dotó de poderes sobrenaturales, seres con raciocinio especial y intuición diferente a la de otros, habrían de estar en cada detalle, donde el hombre común no entretenía su mirada, ellos entenderían y escribirían lo que compartirían con otros en diversos dialectos y maneras de hacerse entender.
Elaborar palabras en un papel tenía una dinámica distinta, queríamos decir las cosas, ponerlas en un balanza, medirlas y pesarlas bajo la lupa del pensamiento, eso no es diferente en ninguno de los momentos que vivimos en esta espacio diminuto de tiempo que llamamos vida. Las dificultades eran otras y el disfrute intenso de poder decir lo que se nos venía a la mente se valía de un carrete entintado y una buena dotación de hojas de papel.
Old Manual Typewriter
Hoy nos inunda una infinidad de palabras escritas, incluso se ha pensado que un robot intuitivo determine el curso de una historia, sobre todo para cubrir las necesidades de los medios de comunicación… El negocio de la información es un mercado dinámico y necesario; miremos entonces al otro lado, ese que nos hace ser creativos y que nos mantiene ante el teclado de un ordenador buscando la frase que nos defina y nos permita mirar el espacio que solo es nuestro, la soledad del que escribe solo la rompe la difusión de su obra, pero jamás veremos en el creador su aliento mezclado a las voces que no ha convocado.
Son historias inolvidables ligadas a la tradición de una familia que aprendió amar lo que hizo su padre y que de alguna forma ha continuado con esa bella tradición; El compromiso de Christopher con las obras de su padre ha visto decenas de publicaciones publicadas, y su propio trabajo como académico en Oxford demuestra su habilidad y habilidad como erudito.
Vaya un momento para el recuerdo y otro para el aliento que nos lleva a recordar la vida de personajes que se quedarán con nosotros para siempre.
Karl Marx (Tréveris, Prusia occidental, 1818 – Londres, 1883) Pensador socialista y activista revolucionario de origen alemán.
Karl Marx decía que los humanos encontramos el amor en el trabajo, muchos se han equivocado, buscando a una persona específica, lo real es que no necesitamos ser de la ideología de escritor pero sí reconocer que aquello que elaboramos a diario y se convierte en nuestra destreza, trabajo, rutina y sustento, posee el aliento y ánimo de los sueños que deseamos, dentro de los centros de trabajo están las personas que tratamos y apreciamos, si acaso no nos llevamos bien con ellos, lo intentamos, ya que sabemos que el desempeño de nuestra labor depende de esa circunstancia en especial, del compaginar con ellos y lograr su respeto y aprecio. De esa forma es real el amor que le tenemos a lo que hacemos es el amor que prodigamos a diario en nuestras actividades. Nos guardamos frases sueltas, frases que nos han contado y en definitiva algunas ue hemos leído y utilizamos por que tienen sustancia, son esenciales y están vivas como lo está el pensamiento del que escribe pese al tiempo…
Un manual para ser niño, es una obra que permite su distribución sin fines comerciales.
El escritor analiza la forma como debería ser entendida la enseñanza de los niños, en uno de sus párrafos señala que si bien es importante la formación para ser escritor, músico o cualquier otra profesión, con la vocación nacemos todos; crear las condiciones favorables y alentar a un pequeño a que siga el llamado de una actividad para la que está predispuesto aun sin saber a ciencia cierta de que va su vocación, es uno de los quehaceres necesarios en la escuela.
Y bien así es no puedes llevar el cauce de un rió a contracorriente… Cerramos esta invitación a alectura m´s allá del video con una frase del propio Gabriel García Márquez:
El secreto de la longevidad
Hacer siempre lo que a uno le gusta, y sólo eso, es la fórmula magistral para una vida larga y feliz.
Un manual para ser niño, 1995.
La vida que uno recuerda
La vida no es la uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla.Vivir para contarla, 2002.
Muchos autores son célebres por haber dicho con las palabras exactas lo que nos hubiera gustado escuchar en alguno de nosotros y sus palabras se vuelven de todos, nos dan sustancia y nos enaltecen para seguir nombrándolos por lo que dura la eternidad, es el caso de Borges, inmortal y consciente de una realidad mágica que nos sacude y alienta a ser mejores a él, grandiosos como él y al mismo tiempo nosotros mismos.
En la búsqueda de nuestra voz somos especiales y somos inimaginables, pero al mismo tiempo somos la sustancia de las cosas que vivimos y experimentamos. Cada uno va con diferentes talentos para encontrar en la vida un modo de ser y decir lo que la palabra nos permite y nos desafiamos para ser lo que anhelamos, en ello nos va la vida.
Kailan, vivía en
un pequeño poblado del condado de Essex, sí le hubieran dicho que con el paso
del tiempo ella haría honor a su nombre cuyo significado era nada menos que
“guardiana de las llaves”, pese a que su madre tan sólo se lo puso
pensando que era un detalle maravilloso e interesante que les recordaría a ella
y su esposo el viaje que hicieron al Castillo de
Hedingham, al quedar fascinados por los trabajos de herrería, sin saber que el
destino realmente convertiría a su pequeña en la guardiana, aunque no
precisamente de las llaves.
Peculiar encuentro con la ciencia
Cuento corto de Ariadne Gallardo
Ella nunca pensó en prepararse con estudios superiores, sabía leer y escribir bien y hacer las cuentas para atender la tienda donde su padre llevaba bollería y pasteles de crema. En las vacaciones de verano visitaba a las tías del condado cercano y les ayudaba a cuidar los becerros, su vida era de trabajo de otra índole, completamente diferente a la que se vivía en las academias, por eso le resultó extraño que le llegara aquella carta.
De los sueños a la realidad
Extraña solicitud
Era una petición inocente, a la cual no podría
negarse, pero tampoco relegar, hasta que los días se convirtieron en semanas y
la persona que necesitaba la respuesta se impacientó y decidió ir a visitarla
sin previo aviso. Algo paso en ese momento, algo que nadie hubiera imaginado ya
que el portador de aquella carta lucia ante los ojos de ella como un recuerdo
de esos que nunca hemos tenido, pero al mismo tiempo son reales, son un atisbo
de lo que la vida nos pudo haber dado y decidió arrebatar.
Llego a su encuentro con una flor a manera de disculpa,
por no notificarle con antelación su presencia en la ciudad y la invitación a
una cena en el sitio que ella decidiera, la charla se antojaba casual, pero en
el interior de Kailan, una especie de inquietud se manifestaba, pese a sus
esfuerzos por evitarla. ¿Qué pretexto podía darle ante la negativa de sus
destinatarios para ser parte del proyecto que el hombre le había solicitado,
cómo evitar la presión de su mirada ante la impaciencia de sus preguntas?
A cada minuto que transcurría ella veía que se le había
confiado una tarea compleja, donde lo mejor hubiera sido decir de entrada, lo
siento no está en mis manos lograrlo, no es de mi competencia, sin embargo,
ella lo vio como una oportunidad de ser útil y ayudar a una persona que no se
encontraba en la ciudad para conseguir los objetivos trazados.
Nada nos prepara para la realidad más que nosotros
mismos, admitirla, ser parte de ella, estar en medio de la incertidumbre y
derrumbarse. Pero ahora el caballero había viajado, le había invitado a la cena
e incluso se había disculpado por no avisar de su llegada; era demasiado para
nuestra pobre amiga, cuyo eco en la voz de los otros no resultaba como se
esperaba, un silencio se apoderó de ella y se bebió de golpe la copa de vino
tinto que acompañaba aquella cena inmerecida para ella.
Se sentía observada, el misterioso caballero observaba
sus reacciones y retrocedía cuando las respuestas de ella se atropellaban,
decidió darle un respiro pese a la precipitación de sus acciones; fue
consciente de su elección, pero ella no lo sabía.
En su mente había preguntas sin respuesta ¿Dónde la
conoció para pedirle la entrega de aquella carta? ¡No se atrevía a preguntar!
¿Tan sólo era el medio para hacer llegar el mensaje, un
mensaje peculiar, una carta sin nombre y tampoco apellido, era el pedimento de
un compromiso a una persona que ella debía elegir y hacerla portadora de la
noticia, comprometerla a leer un documento de grandes dificultades
intelectuales y verter un argumento a favor o en contra de este?
¿Qué tan importante era ese trabajo? No era un descubrimiento
sino la aplicación de un trabajo que en el pasado no había tenido repercusión
en la población y precisamente ahora tenía la oportunidad de ser útil, de
renacer como el ave fénix y colocarse en el sitio de privilegio que le
correspondía.
Mientras partía su filete Kailan miraba de reojo al
enigmático caballero que sonreía feliz ante el encuentro y para ella era una
incógnita sin respuestas, ella imaginaba que había sido utilizada, para
difundir una noticia, pero al mismo tiempo se sentía incomoda, desconocía si
realmente era la indicada. Kailan sintió que se derrumbaba su confianza y
seguridad, desaparecían a cada minuto en esa carta inusual, era presa de los
nervios al no poder responder con seguridad.
El misterioso hombre le extendió una tarjeta y le indico
el siguiente paso a dar, era la dirección donde debía ser llevada la respuesta
de la persona portadora de la carta que ella tenía aun en sus manos. Y exclamó:
-De esta forma podrá sentir que el peso de mi encomienda
disminuye, lo único que necesita es colocarla en las manos adecuadas. No se
preocupe solo le pido que visualice que persona es la adecuada para confiarle
esta tarea.
Kailan, no pudo evitar exclamar con un suspiro discreto
que pronto se vería liberada de esa tarea y se animó a preguntar:
¿Cómo sabré quien es la persona indicada? Muchos podrían
serlo y algunos no le darían el valor que tiene dejándola en el olvido y eso me
inquieta puesto que conozco sus credenciales académicas, les reconozco como
parte de una disciplina, pero no sé hasta donde prestarán atención a la
solicitud que les haga. Son gente ocupada que se cuida de intervenciones
externas, celosa de su tiempo y la forma cómo lo organizan.
-Usted no lo piense simplemente obsérvelos y sus actos
le dirán quién es el indicado.
En la
agenda
Con buen ánimo Kailan tomo su bolso a temprana hora y se fue en busca
de algunos archivos agendó los nombres de las personas que consideró serían las
más dispuestas a emprender la travesía que había sido puesta en sus manos;
agendó los nombres de algunos de los científicos, relacionó sus trabajos con
astronomía euclidiana, teoría de cuerdas y la correlación existente entre unos
y otros al mencionarse en sus trabajos doctorales y tesinas, había un universo
donde todo creaba una resonancia entre el pensamiento de unos y el de otros, no
sabía si ese método daría el resultado esperado, pero hizo copias de la carta
de escasas 16 páginas que el misterioso científico le había confiado y se fue a emprender la
conquista de esas mentes escépticas y distantes para ella.
Hizo llegar en propia mano los papeles a cada uno de los profesores y
les explicó que la persona que le había dado tal encomienda confiaba en que
ellos eran los indicados para dar fe de que lo que tenían en sus manos podría
cambiar el espectro de la ciencia; tuvo temor de repente, no estaba segura de
haber hecho lo adecuado, tal vez se tomó la atribución con demasiada ligereza
pero a esa altura del camino no le quedaba otro remedio, si un ser humano se
valía de su valentía para lograr el objetivo, ella tenía que demostrar que no
había sido en vano elegirla, por muy al azar que hubiera sido.
Por supuesto pasaron varias semanas, ella
colocaba una palomita en la lista de personalidades que habían aceptado liberar
sus agendas para asistir al salón dispuesto para la gran disertación.
Se quedó esperando la llamada del profesor, pero no sucedió, imagino
que confiaba demasiado en su poder de convencimiento, quizás solo le dejó el
tiempo libre para probar si realmente cumpliría con su encomienda, no lo sabía,
no quiso investigar más, solo continuó con aquella tarea inusual y cada que
sonaba su celular imaginaba que sería el profesor preguntando su progreso en
todo esto, pero no fue así.
El día y la hora señalada estaba cerca, todo dispuesto ella se limitó
a pedir el servicio de cafetería y refrigerios en la hora señalada y encogerse
de hombros al no contar con la posibilidad de dejar una nota de Messenger o
Whattsup al profesor confirmando que todo estaba tal como lo había dispuesto y
solicitado semanas atrás.
La noche anterior al encuentro Kailan no pudo dormir, se agitaba en
las sábanas con los nervios de punta, deseando que todo resultara como se había
convenido.
Llegó una hora antes para disponer detalles, ansiosa ante la
supervisora mirada de los asistentes; como era de esperarse todos llegaron
preguntando la persona que les había entregado la carta…
Asunto por demás extraño ya que no hubo uno solo que mencionara al
profesor; Kailan dispuso el salón y acomodó el asiento para el profesor, cuando
vio que todos ya ocupaban sus lugares ruborizada fue en busca de otra silla,
misma que permanecería vacía durante toda la reunión, curiosamente nadie reparó
en ello.
Sin embargo, algo les decía que ellos eran el punto de convergencia de
todo lo que se haría de ahí para adelante, aquellas 16 páginas le daban a cada
uno de ellos la capacidad para empoderarse en sus áreas y ser un todo con el
planteamiento y por tanto la encomienda había cumplido su derrotero; alcanzar
el objetivo era tarea de los convocados.
Disertaciones
El cono de luz por el que se podía observar la realidad era
perceptible solo para los que sabían observar con paciencia; el documento
predecía que, al lograr entender la ecuación, todos los mecanismos serían
dispuestos para comunicarse.
Podía admitirse alguna forma preestablecida, algunos sugieren
formaciones geométricas otros no están tan seguros de ello, pero todos y cada
uno de los convocados, aseguraban que lo que tenían enfrente no era nada
conocido y estaba anclado en conocimientos muy respetados por otras
generaciones.
De pronto todos voltearon hacia la silla vacía del profesor
ausente y uno de ellos dijo:
— ¿Están observando lo mismo que yo?
Todos comenzaron a escribir en el papel de sus escritorios y
coincidieron que la forma geométrica de la silla estaba considerada como la
base del cálculo a seguir, uno de ellos se levantó para ir a la pizarra y
anotar. El dominio de ese esquema les daría la respuesta que buscaban.
Kailan se limitaba a servir café para los asistentes y se
percataba de lo positivo de su esfuerzo, había logrado lo que el misterioso
profesor le había solicitado, incluso llegó a intuir que su ausencia obedecía a
una de las señales que él había dejado al grupo. Sonrió insegura de que así
fuera, pero contenta de ver a todos los científicos concentrados en lograr
esclarecer aquella interesante tarea que ella en realidad no entendía del todo.
Dos de los asistentes e tomaron fotografías para recrear la
simulación de un holograma dinámico, y recurrieron a los cálculos que había
dejado el profesor ausente, al final de la disertación los ángulos de la silla
que había sido el modelo se dibujaron en la pizarra y ya no estaba más la silla
como modelo, ahora parecía un sillín de montura.
Kailan miraba su reloj pues ya habían transcurrido dos horas en
aquella aula universitaria donde se reunieron los científicos y nadie daba
señal de querer irse, había un frenesí que los cautivaba a todos por entender
lo que estaba pasando. el poder de abstracción de cada uno de ellos envolvía el
ambiente.
En ese momento solicitaron a Kailan que fuera por un modelo a
escala que estaba en la habitación contigua al salón, uno de los científicos
señaló que al momento que la chica estaba en esa habitación ellos ya estaban
imaginando el modelo sin verlo, todos lo habían visto antes y eso les dio la
idea que el misterioso profesor les había mostrado, un universo espejo que
podía medirse en escala menor y visualizarse en resonancia universal.
Al regresar al salón Kailan los observaba, no había escuchado
lo que decían, pero sintió la mirada de todos, pensó para sí, tal vez tarde
mucho en llegar con este artefacto… y se
disculpó dejando la caja sobre la mesa.
Un grupo dibujó una curva en la pizarra, otro anotaba
ecuaciones, Kailan se sentía intimidada con esos razonamientos tan bien
calculados, en realidad ella toda su vida reconoció que para las matemáticas se
necesitaba una forma especial de ser que ella no poseía. Le agradaba que ese
grupo de seres con cerebros calificados para las ciencias exactas estuvieran
ahí, en muchos momentos como mediadora y asistente del misterioso profesor
sentía que el cielo se derrumbaba sobre su cabeza, pero era verdad el
científico le había dicho: “Sabrás quienes son merecedores de este
descubrimiento con sólo verlos”, ahora lo entendía.
Había una curva que atravesaba el conjunto y a eso no le podían
nombrar, necesitaban algunos datos que no se entendían totalmente, la longitud
de una curva que podía extenderse más allá de lo conocido y en varios sentidos
era un conductor, algo que viajaba hacia una dirección u otra…
Comenzaron a mencionar a Euclides, y otros sabios de la
historia que habían dado su nombre a los descubrimientos y procedimientos
matemáticos y cuyos nombres no pudo recordar Kailan con facilidad y mucho menos
entender cuáles eran los logros de éstos.
Algo era cierto y contundente estaban simplificando un modelo
que los llevaría a un cálculo sorprendente y que abría la puerta a un
imaginario que solo se había situado en los escenarios de la ciencia ficción y
ahora tenía peso científico para reconocerlo como tal.
La noche era densa y los bostezos anunciaron a todos que era
hora de dejar en reposo los cálculos y meditar con la almohada lo que había
sido puesto en sus manos; así quedaron de verse en dos semanas, dejar libres
las agendas y colocarse en torno a ese dibujo con el parecido asombroso a una
silla de montar para continuar con los cálculos y el tejido de esta historia
que se antojaba sin precedentes para la mayoría.
Kailan tenía la impresión de que todos los ahí
presentes conforme leían las hojas que ella les había entregado reconocían el
trabajo del profesor, nadie mencionaba su nombre o si, pero ella no lo sabía.
Todos se asombraban de aventurarse en las intrincadas ecuaciones y reconocer el
trabajo de un superior y eso les llenaba de entusiasmo. Bien no quedaba más
remedio que esperar dos semanas para saber qué sucedería.
Todos se despidieron con amabilidad y un anciano
de cuerpo delgado y cabello rizado, al estrechar su mano dijo algo que la
intrigó:
En lo personal le agradezco haber
resguardado esas hojas, imagino se ha percatado de lo valiosas que son, muchas
gracias.
Kailan quedó boquiabierta e imagino que el hombre
se había confundido, trató de articular alguna frase, pero en su vacilación el
amable caballero tomo su sombrero y se retiró.
La
reunión
Llegó el día de la reunión Kailan preparó todo
como la vez anterior, la charola con los canapés y el servicio de café estaba
dispuesto, y ella seguía en su función de asistente, en todo momento miraba la
entrada, supuso que en esta especial ocasión todos los presentes ya se habrían
comunicado con el profesor, al seguir sus apuntes todos lo habían hecho de
alguna forma; en la imaginación de la chica lo imaginaba entrando y colocándose
en el podio para recibir una entusiasta ovación.
Al encontrarse todos los presentes el anciano alto
de cabello rizado se dirigió al podio y con voz pausada comenzó su discurso:
Estimados caballeros aquí reunidos en este festejo
de la ciencia que celebramos 18 años después de la partida de nuestro camarada,
el genial físico de Cambridge, sus últimos trabajos necesitaban de una visión
detallada, de la cual no teníamos total certidumbre y gracias a la ayuda de la
dama que nos ha convocado al encontrar los papeles extraviados de nuestro
amigo, ahora podemos seguir los hallazgos con gran precisión, la mayoría de los
aquí presentes conocimos sus investigaciones y trabajamos con ahínco en sus
geniales disertaciones, no podemos negar que lo consideramos un sabio adelantado a su época…
Kailan servía el café en lo que el sereno
caballero exclamaba su emotiva elocución.
Llegar a este punto de su investigación es un
logro, Stephen siempre fue muy cuidadoso y dejaba pistas a sus colegas para que
encontraran nuevos horizontes en el panorama científico, sin embargo, hoy
contamos con la fórmula matemática precisa para el descubrimiento de universos
paralelos, el trabajo que le acreditaría a recibir el premio Nobel a nuestro
querido maestro al ser sorprendido por la muerte.
Kailan no supo que pensar, acaso el científico que
ella conoció resguardó hasta ese momento las 16 carillas, pero qué razón podría
haberlo impulsado a ello. Sólo se encogió de hombros y continuó con su trabajo.
El científico hizo una pausa y señaló: Convoco a
todos los aquí presentes: Al completar cada detalle del diseño jamás olvidemos
que nuestro maestro merece un homenaje póstumo con la dignidad de su
investidura, 18 años de investigaciones, no nos han permitido avanzar hasta
ahora…
El auditorio se puso de pie y el aplauso fue
unánime. Kailan sonreía, la embriagaba una profunda alegría al recordar la
frase del misterioso profesor cuando le dijo, usted sabrá a quien debe dar
estos papeles, solo obsérvelos.
Una cortina cayó y la imagen de un hombre de
mediana edad apareció, rostro amable con una media sonrisa como señalando lo
divertido de la vida, ojos azules de marco metálico, sentado en una silla algo
diferente a lo que Kailan conocía o hubiere conocido antes; la silla de una
persona con una enfermedad que le inmovilizaba… A diferencia del caballero
que ella recordaba cuando la citó en el restaurante; un hombre de caminar
pausado y con sus funciones corporales íntegras, el rostro tenía un parecido
extraordinario y la fotografía estaba enmarcada con gran belleza en madera de
roble pulida y con un relieve de terciopelo rojo, las clásicas fotografías del
salón de celebridades de la institución.
Dr. Stephen Hawking
Kailan se llevó la mano a la boca para ahogar un
grito de sorpresa y terror cuando escuchó al científico decir:
Gracias a esos trozos de papel que hoy forman
parte del acervo cultural y científico de nuestra institución, pensamos que el
profesor Hawking, con ese fino sentido del humor que le caracterizaba, nos ha
gastado una de sus bromas y acotó: «La mejor
prueba de que no es posible viajar en el tiempo es que no estamos invadidos
por una legión de turistas del futuro».
Concluyo que tenía toda la razón, no podemos
viajar en el tiempo, pero lo que hemos hecho en el mundo de alguna u otra forma
cumple su derrotero en el momento preciso.
Kailan entendió que no podía decir nada, esa
parte de la historia no podía probarla, pero sabía que el en futuro lejano,
ellos lo harían.
*Basado en el último trabajo del profesor Stephen
Hawking: A Smooth Exit from Eternal Inflation?
Nos hacíamos llamar comunidad asatru de uruguay, sin tener en cuenta que puede llevar a malentendidos dado que nunca fuimos eso. Este sitio fue parte de un antiguo proyecto de dos amigos interesados en el asatru. Ya no se actualizará lamentablemente. También faltan algunas imágenes que en nuestra ignoracia copiabamos de internet en vez de incluirlas en el sitio. Espero que lo que se ha restaurado, y el resto del sitio sea de su agrado. * Actualización: No me hago cargo del contenido de años anteriores. En mi tiempo libre seguiré actualizando imágenes de posts antiguos y quizá publique alguno nuevo.
DVE - Devecchi Ediciones - Con un catálogo de más de 2.000 títulos, publicamos libros ilustrados en múltiples idiomas, listos para la coedición internacional y con los derechos de autor disponibles. Nuestros libros son innovadores, apasionantes, didácticos y económicos.